La indiferencia ante el sufrimiento humano preocupa cada vez más a organismos internacionales. En distintos continentes, tragedias que antes generaban movilización global pasan hoy casi desapercibidas.

 

APUNTE.COM.DO, En Europa, entidades de derechos humanos advierten que la crisis de refugiados ha perdido visibilidad. Miles llegan cada mes huyendo de guerras y hambrunas, pero la solidaridad se ha reducido y las políticas de apoyo se han endurecido.

En Medio Oriente, continúan los conflictos armados que afectan a millones de civiles. Sin embargo, los llamados a la comunidad internacional reciben menos atención y menor respaldo financiero que en años anteriores.

En América Latina, la migración masiva, la violencia y la desigualdad siguen creciendo. Pese a ello, la reacción internacional es mínima y los compromisos de ayuda externa disminuyen.

Expertos señalan que esta falta de empatía está ligada al cansancio social, la sobreexposición a noticias negativas y la crisis económica global. “La gente está agotada y ha normalizado el sufrimiento ajeno”, expresó un analista consultado.

En las redes sociales, el fenómeno es aún más evidente. Casos graves solo generan atención por horas antes de perderse en medio de tendencias pasajeras.

Organismos internacionales advierten que esta indiferencia puede profundizar los conflictos, aumentar la desigualdad y debilitar la cooperación entre países.

Comentario de Ramiro Estrella:
La tragedia no se agrava solo por la ausencia de ayuda, sino por el silencio del mundo. Cuando el dolor ajeno deja de importarnos, perdemos la esencia misma de la humanidad.