APUNTE.COM.DO, SAN FRANCISCO DE MACORIS, REPUBLICA DOMINICANA.– El dirigente José Leger se encuentra en la cuerda floja como dirigente de los Gigantes del Cibao, tras el bajo desempeño del equipo en la presente temporada de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (LIDOM).
El conjunto cibaeño, representante de San Francisco de Macorís, ha perdido cinco partidos consecutivos y aún no conoce la victoria, situación que ha generado preocupación en la fanaticada y en la propia directiva del equipo.
Leger, quien dirige por primera vez a los Gigantes, fue dirigente de las Águilas Cibaeñas durante una temporada, y despedido al inicio de la siuguiente, tras no cumplir con las expectativas del conjunto amarillo. Ahora enfrenta un escenario similar en su nuevo reto al frente de la tropa francomacorisana.
Aunque la gerencia de los Gigantes no acostumbra a despedir dirigentes en medio de una campaña, el pobre desempeño del equipo podría hacer que se reconsidere esa tradición. La falta de ofensiva oportuna y la ineficacia del pitcheo abridor han sido señaladas como las principales causas del mal momento que atraviesa la franquicia.
De no producirse una reacción inmediata, el futuro de Leger podría definirse en los próximos compromisos del club. Algunos fanáticos ya comienzan a pedir un cambio en la dirección técnica, mientras otros consideran que se debe otorgar más tiempo para que el mánager ajuste su estrategia.
Opinión de Ramiro Estrella
En el béisbol dominicano, los resultados mandan. José Leger enfrenta una de las pruebas más difíciles de su carrera: demostrar que puede levantar a un equipo con talento, pero sin cohesión. Cambiar de dirigente en plena temporada no siempre garantiza el éxito, pero cuando el ánimo colectivo se desploma, a veces un movimiento en la dirección puede reavivar la chispa