APUNTE.COM.DO, Santo Domingo.– María Montez fue la primera gran figura del cine dominicano en alcanzar fama internacional y una de las actrices latinas más reconocidas de Hollywood durante la década de los años 40.

Nacida como María África Gracia Vidal, el 6 de junio de 1912, en Barahona, República Dominicana, Montez se convirtió en un ícono del cine de aventuras, destacándose por su presencia escénica, belleza exótica y carisma frente a las cámaras.

Su carrera despegó en Hollywood bajo el sello de Universal Pictures, donde protagonizó películas filmadas en Technicolor, un formato innovador para la época. Esa característica le valió el sobrenombre de “La Reina del Technicolor”.

Entre sus producciones más recordadas figuran Arabian Nights, Ali Baba and the Forty Thieves y Cobra Woman, cintas que la consolidaron como una de las actrices más populares del cine fantástico y de aventuras.

María Montez compartió escena con reconocidos actores internacionales y logró posicionarse en una industria que, en ese momento, ofrecía pocas oportunidades a artistas latinos.

Tras su paso por Hollywood, se trasladó a Europa, donde continuó trabajando en cine y teatro. Se casó con el actor francés Jean-Pierre Aumont y fijó residencia en París.

Su vida se apagó de manera trágica el 7 de septiembre de 1951, a los 39 años, cuando falleció en su residencia en la capital francesa.

A pesar de su corta vida, el legado de María Montez permanece vigente. Su nombre identifica avenidas, teatros y centros culturales en la República Dominicana, y su historia continúa inspirando a nuevas generaciones de artistas.

Comentario

Para el periodista y abogado Ramiro Estrella, director ejecutivo de Apunte.com.do,
“María Montez no solo fue una estrella de cine, sino un símbolo de orgullo nacional. Abrió puertas cuando ser latino en Hollywood era una barrera casi infranqueable, y su historia merece ser contada y recordada con respeto”.