Cuidémonos de un boicot del PLD

Para nadie es un secreto que nuestra República Dominicana viene atravesando por una crisis en todos los sentidos, sobre todo, en ámbito moral, y ahora lamentablemente tenemos que agregarle la presente pandemia, que no sólo ha hecho estragos en nuestro país, sino en todo el mundo.

La presente pandemia se traduce en un mayúsculo obstáculo para el tan necesario crecimiento económico, puesto que las recaudaciones fiscales, las exportaciones, el turismo y las remasas han experimentado un sustancial descaída, lo que nos coloca en una situación sumamente delicada.

Es de rigor establecer que los desgobiernos del Partido de la Liberación Dominicana se caracterizaron por llevar a nuestra nación a un endeudamiento irresponsable que hoy por hoy ha dado al trate con nuestra capacidad de pago, una macabra acción que solo sirvió para enriquecer a los altos dirigentes y funcionarios de dicho partido.

Dada esta delicada situación en la que nos encontramos, el país se ha visto compelido a acudir nuevamente al endeudamiento externo por más de 4 mil millones de dólares en apenas 50 días, para poder encarar las principales necesidades del país.

Algunos consideran  que la presente pandemia ha impactado negativamente el sistema alimentario de nuestro país, que se traduce en una reducción de la disponibilidad de alimentos a nivel nacional. 
No obstante nuestra delicada situación, me parece que la producción agrícola se ha mantenido más o menos estable, sin que se haya producido ninguna escasez o una caída significativa con respecto a lo esperado. La disponibilidad de bienes alimenticios de producción nacional e importados ha sido adecuada para satisfacer la demanda. 

Sin embargo, las empresas no han corrido con la misma surte, ya que por lo menos miles han cerrado sus puertas, dejando a cientos de miles de personas desempleadas.

Los ciudadanos sabemos que las presentes autoridades encontraron un país en ruina y totalmente saqueado por la corrupción y han tenido que emplearse a fondo para garantizar el funcionamiento del país.

Pero el país, además de que debe cuidarse de la presente crisis y de la presente pandemia, debe cuidarse de un boicot del PLD al presente gobierno, un gobierno que ha dado muestra fehaciente de su interés de sacarnos por buenos caminos.

Es como ha dicho uno de los articulistas de este periódico: “El presidente Abinader es un instrumento de resurrección democrática, debido a que nuestro sistema de libertad e independencia  no soportaba más, que las garras del Covid_19 continuara perforando los bronquios famélicos de nuestra bandera tricolor, diezmada por esta corrupta pandemia política”.
Los ciudadanos conscientes saben perfectamente cuales son las verdaderas intenciones del presidente Luis Abinader y los hombres y mujeres que le acompañan en esta dura batalla, que no es otra que la de poder superar esta delicada situación en la que nos encontramos y la de corregir cuanto ante la ruina dejada por el PLD.
Preparémonos pues  para la oposición politiquera y barata de este partido y no nos descuidemos jamás de sus planes boicot, que es lo único que saben hacer.