No hay nadie que se haya escapado de lidiar con un grano que sale en el momento más inoportuno. Tampoco hay quien no se haya preguntado cuándo desaparecerá, deseando que eso ocurra muy pronto.
Una empresa estadounidense especializada en el cuidado de la piel, mySkin, asegura haber encontrado la mejor manera de combatir al visible invasor gracias a la interacción de la luz con la piel.
La clave, explican, está en el análisis del rostro. Esto se hace con un pequeño dispositivo, similar a la cámara de una computadora, que al colocarse sobre la cara y el área afectada por el grano revela lo que pasa en las capas internas de la piel, como por ejemplo la actividad de las glándulas sebáceas y el nivel de inflamación.
El aparato, llamado Scan Z, se conecta a través de un cable al celular y envÃa la información a una aplicación (App) que analiza la espinilla, la cataloga, indica por cuánto tiempo estará visible, recomienda los productos que deberÃan usarse para acelerar su desaparición y evalúa la efectividad del tratamiento sugerido.
"Hay muchos tipos de granos, asà que saber cuál es el que la persona tiene es muy importante para decidir cuál es el tratamiento que puede resultar más exitoso para acortar su ciclo de duración. Los algoritmos que utilizamos para analizar la piel se basan en estudios clÃnicos", indica Rahul Mehendale, director de mySkin.
Una vez que el programa ha determinado cuántos dÃas va a durar la espinilla, y si se trata de puntos blancos, negros, pápulas, pústulas, nódulos o cualquier otra variación, el paso siguiente es llenar una especie de formulario en el teléfono móvil con datos acerca de la alimentación y el cuidado de la piel.
Con esa información, la aplicación recomienda los mejores medicamentos para tratar la lesión y vuelve a calcular el tiempo en el que deberÃa desaparecer, menos, en teorÃa, si se ponen en práctica las recomendaciones.
Posteriormente, la persona vuelve a realizar el procedimiento para saber si el tratamiento está funcionando o no. Si el caso es el último, se cambian los productos sugeridos para procurar acelerar la desaparición del grano.