La República Dominicana ha sido sacudida una vez más por un hecho grave de corrupción, en el caso de la compra de 8 aviones Súper Tucano, en Brasil, por el que un senador y varios militares recibieron un soborno de 3.5 millones de dólares, conforme a una investigación ordenada por Estados Unidos.

Por la operación, considerada irregular, fueron sometidos a la justicia ocho empleados de la compañía brasileña, según reveló el periódico "The Wall Street Journal", de los Estados Unidos.

El caso fue descubierto tras una investigación iniciada en los Estados Unidos por la Comisión de Bolsa y Valores y el Departamento de Justicia de ese país.

Y lo más penoso de todo esto, es que en la República Dominicana este caso correrá a misma suerte de otros donde han aflorado actos de corrupción, porque los probables o casi seguros culpables pertenecen a la misma organización politca del presidente Danilo Medina, (Partido de la Liberación Dominicana).

.No se conoce la primera persona vinculada a actos de corrupción que haya sido sometida a la Justicia en la gestión del presidente Medina, y en los pocos casos que ha presentado la oportunidad de hacerlo no ha sido posible por los obstáculos para llevar a cabo la investigación,.según lo reveló la propia fiscal del Distrito Nacional, Yeni Berenice cuando investigaba el caso del ex ministro de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, cuyo expediente fue archivado de manera definitiva en otro estamento judicial.

Quisiéramos aspirar, como lo desean amplios sectores del país, que el Procurador Francisco Domínguez Brito dispusiera una investigación seria, a fin de determinar las personas vinculadas con este hecho bochornoso de los aviones Súper Tucanos, pero eso sería imposible, ya que pueden resultar culpables personas que por su gran Poder político y económico no pueden ser tocadas.

Definitivamente, estamos en presencia de un gobernante, que por el momento puede tener un buen porcentaje de aceptación entre la población dominicana, por las ejecuciones que ha llevado a cabo, cuya popularidad puede ser más percepción que realidad, pero es el peor de todos, cuando se trata de corrupción, puesto que no ha respaldado el primer sometimiento a la Justicia de funcionarios de su Gobierno vinculados a hechos que pudieran atentar contra las leyes establecidas.

Danilo Medina ha dicho que no es Justicia para sancionar la corrupción, pero no se le conocen declaraciones motivando el sometimiento de quienes han cometido dolo, porque sencillamente, no le interesa encarar uno de los graves problemas que mantiene en el retroceso a la República Dominicana.