APUNTE.COM.DO, SANTO DOMINGO, REPÚBLICA DOMINICANA La disposición de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas de no sancionar a sus miembros por su orientación sexual generó fuertes críticas en distintos sectores del país.

Grupos conservadores reaccionaron de inmediato. El Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE) calificó la medida como “un retroceso moral” y aseguró que las instituciones castrenses “no pueden ceder a modas culturales”.

El obispo Víctor Masalles también expresó preocupación. Dijo que decisiones de ese tipo deben evaluarse con mayor profundidad porque “pueden chocar con la identidad institucional”.

Entre militares retirados hubo rechazo. El general (r) Juan Tomás Taveras acusó a las autoridades de actuar “sin consultar a quienes conocen la vida militar”, y advirtió que el cambio podría generar “tensiones internas”.

Analistas de seguridad también reaccionaron. El experto Daniel Pou señaló que la decisión es positiva desde el punto de vista de derechos humanos, pero reconoció que “el principal reto será manejar la resistencia cultural dentro de los cuarteles”.

En redes sociales el debate se polarizó. Un segmento de la población celebró que se elimine cualquier forma de discriminación, mientras otro consideró que la medida responde a “presiones externas”.

Voceros de la PN y el Ministerio de Defensa defendieron la disposición. Aseguraron que la disciplina, la jerarquía y los reglamentos se mantienen intactos, y que ningún miembro será evaluado por asuntos de su vida privada.

El tema seguirá generando reacciones, mientras distintos sectores sociales, religiosos y militares continúan fijando posiciones.