APUNTE.COM.DO, Santo Domingo.– Psicólogos y especialistas en comportamiento humano coinciden en que existen dos formas esenciales y positivas de vivir la vida: una centrada en el crecimiento personal y otra en la conexión con los demás. Ambas, según los expertos, contribuyen a una existencia más equilibrada, feliz y significativa.
La primera forma consiste en desarrollar el potencial individual, lo que implica fortalecer la mente, cuidar el cuerpo y mantener una actitud de aprendizaje constante. “La persona que busca crecer, mejorar y aprender algo nuevo cada día, encuentra propósito y dirección en su vida”, explicó la psicóloga clínica Maribel García, consultada por Apunte.com.do.
La segunda forma positiva está basada en cultivar relaciones saludables, ya sea familiares, sociales o laborales. De acuerdo con el terapeuta motivacional Carlos Díaz, “las personas que se enfocan en servir, ayudar y crear lazos sinceros suelen disfrutar de una vida emocionalmente más estable y menos estresante”.
Ambos enfoques, según los especialistas, se complementan. El crecimiento personal sin empatía puede llevar al egoísmo, mientras que vivir solo para los demás puede generar frustración si se descuida el propio bienestar.
Los expertos recomiendan encontrar un equilibrio entre ambas dimensiones: trabajar cada día en mejorar como ser humano y, al mismo tiempo, fortalecer el vínculo con quienes nos rodean.
“Vivir con sentido no depende de la suerte, sino de la intención con que enfrentamos cada día”, concluye García, destacando que la gratitud y la actitud positiva son claves para disfrutar plenamente del presente.