Desde joven, Marcelo Bermúdez se integró al Movimiento Revolucionario 14 de Junio, organización clandestina que desafió al régimen de Rafael Leónidas Trujillo. Fue apresado por el temido Servicio de Inteligencia Militar (SIM) y recluido en las cárceles de “La 40” y “La Victoria”, donde sufrió torturas junto a otros jóvenes patriotas.

Tras el derrocamiento del presidente Juan Bosch en 1963, Bermúdez se unió al alzamiento de Las Manaclas, encabezado por Manolo Tavárez Justo, en defensa del retorno al orden constitucional. Logró sobrevivir a esa gesta histórica que marcó la conciencia democrática del país.


Empresario, escultor y servidor público

Después de su paso por la lucha revolucionaria, Bermúdez canalizó su espíritu de trabajo en la creación de empresas en la región del Cibao, particularmente en el sector del calzado y las zonas francas, contribuyendo al desarrollo económico de Santiago.

Su sensibilidad artística lo llevó a convertirse en un escultor reconocido, participando en certámenes del Concurso de Arte Eduardo León Jimenes y siendo uno de los fundadores de la Casa de Arte de Santiago, un espacio clave en la promoción de la cultura y la libertad creativa.

En el ámbito público, desempeñó el cargo de gobernador de Santiago durante la primera gestión del presidente Leonel Fernández (1996-2000), destacándose por su trato sencillo, su ética y su entrega a las causas sociales.


Una vida ejemplar

Marcelo Bermúdez fue considerado un hombre de principios firmes y espíritu progresista. Las organizaciones políticas, culturales y sociales del país han expresado su pesar por su fallecimiento, reconociendo su entrega a la democracia y su aporte al desarrollo de la nación.

Sus restos son velados en la Funeraria Fuente de Luz, en Santiago, y serán sepultados este martes tras una misa de cuerpo presente.


Legado vivo

Más allá de su participación en la historia política, Bermúdez dejó huellas profundas en el arte, la cultura y la conciencia ciudadana. Su ejemplo enseña que la libertad se defiende no solo en los campos de batalla, sino también en el trabajo honesto, la creación artística y la educación cívica.


Opinión de Ramiro Estrella

Ramiro Estrella, periodista, abogado y director ejecutivo de Apunte.com.do, expresó que “la muerte de Marcelo Bermúdez representa la partida de uno de los hombres que mejor encarnaron el espíritu de sacrificio por la libertad y la dignidad del pueblo dominicano. Fue un símbolo de coherencia entre pensamiento y acción, un ciudadano que supo transformar la lucha armada en una vida de servicio, cultura y decencia. Su ejemplo debe inspirar a las nuevas generaciones a defender la democracia con la misma pasión con que él defendió la patria.”