APUNTE.COM.DO, SANTO DOMINGO.– Aunque el amor es la base de toda relación sentimental, expertos nacionales e internacionales coinciden en que no basta por sí solo para garantizar una unión sólida, duradera y saludable.
El mito de que “el amor todo lo puede” sigue siendo una de las principales causas de frustración y rupturas en las parejas modernas.
La psicóloga clínica dominicana María Isabel Hernández afirma que el amor es apenas el punto de partida.
“El problema es que muchas personas creen que sentir amor es suficiente, pero mantener una relación estable requiere madurez emocional, comunicación abierta, respeto y compromiso”, expresó.
El terapeuta de pareja Juan Carlos Lora añade que la convivencia pone a prueba la verdadera fortaleza de los vínculos.
“El amor es una emoción; la convivencia es una decisión diaria. No basta con sentir, hay que actuar. Si no se cultiva el respeto, la paciencia y la empatía, el amor se convierte en una ilusión pasajera”, explicó.
A nivel internacional, la reconocida psicóloga estadounidense Esther Perel, autora del bestseller “Mating in Captivity”, señala que las relaciones modernas fracasan “no por falta de amor, sino por exceso de expectativas”.
Según ella, hoy las parejas esperan que una sola persona satisfaga todas sus necesidades emocionales, lo cual es insostenible sin equilibrio ni comunicación.
El psicólogo español Rafael Santandreu, autor de “El arte de no amargarse la vida”, sostiene que “el amor maduro no busca llenar vacíos, sino compartir plenitud”.
A su juicio, las relaciones duraderas se basan en compatibilidad emocional, diálogo y aceptación de las diferencias.
“Quien espera que el amor sea perfecto está destinado a la decepción”, puntualizó.
La orientadora familiar dominicana Rosa Almonte resalta que las parejas deben aprender a manejar los conflictos sin destruirse emocionalmente.
“Las discusiones son normales, pero la falta de respeto y el silencio prolongado son señales de alerta. Amar también significa saber cuándo pedir ayuda profesional”, dijo.
El sociólogo Eduardo Castillo advierte que los cambios sociales y tecnológicos también han transformado la forma de amar.
“Las redes sociales, la cultura del descarte y la falta de tiempo real para compartir generan vínculos superficiales. Hoy más que nunca se necesita disciplina emocional para sostener una relación sana”, indicó.
Según estadísticas del Poder Judicial dominicano, más del 60 % de las separaciones se deben a conflictos de convivencia, desconfianza, infidelidad y problemas económicos, más que a la ausencia de amor.
Estudios de la Universidad de Harvard confirman que las parejas más felices son aquellas que priorizan la comunicación y el apoyo mutuo por encima de la pasión inicial.
En conclusión, el amor es necesario, pero no suficiente.
La psicóloga Esther Perel lo resume así: “Amar no es mirar al otro todo el tiempo, sino mirar juntos en la misma dirección”.
Y como concluye la terapeuta dominicana Hernández, “el amor es la semilla; la convivencia, la paciencia y la comprensión son el suelo fértil que la hacen florecer”.