Ignorancia Autoimpuesta o Fabricación de Ignorancia Inconsciente. Parte XII

A modo de ejemplo, la población trabajadora de cada país pasó de ser ahorrante a ser endeudado. Trabajan para pagar sus deudas. En el pasado, para aquellos que viven en el presente y olvidan la historia, las generaciones desde los babies boomers hacia atrás, ahorraban su dinero y compraban con sus ahorros. Pero esto no era conveniente a los bancos, pues tenían que pagar intereses por los depósitos. Hoy en día ellos cobran intereses altísimos a la gente por los préstamos y tarjetas de créditos. Mientras le pagan una miseria por lo poco que pueden ahorrar; si es que ahorran. Apenas le pagan de un 2 a 3 por ciento en intereses por los ahorros. Le clavan un 18 a 27 por ciento en intereses por los préstamos y las tarjetas de créditos. ¡Que buen negocio!

Los economistas y financieros del establecimiento no hablan sobre esto, ni los medios de comunicación lo dicen. Periodistas y comunicadores se quedan callado si lo saben. Aunque la mayoría de ellos—podemos estar casi seguro--no lo saben, como tampoco les interesas saberlo. Típicos ejemplos de ignorancia voluntaria en un sector que se escuda tras la llamada verdad y la libertad de expresión—lo que expresan y defienden son los intereses de las élites, ya sea por omisión o por comisión. El punto principal es que los poderosos, las élites, quieren sumergirnos en la ignorancia voluntaria. Esto trabaja a favor de sus intereses, pues los individuos no se pueden agrupar en grupos de presión para defender sus intereses como clase social y abogar por una repartición menos desigual. Los lideres políticos, empresariales, militares y eclesiásticos están embarcados en propagar la ignorancia voluntaria. Es conveniente para ellos mantener sus intereses y posiciones privilegiadas.
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