Foto familiar antes del secuestro

 

China.- Un hombre logró reencontrarse con sus padres biológicos 32 años después de haber sido secuestrado, luego de que la Policía lo ubicó gracias a una pista y el sistema de reconocimiento facial.

Mao Yin tenía dos años cuando fue raptado frente a un hotel den Xian, enla provincia central de Shananxi, en 1998, en momento que estaba vigente la política de un solo hijo.

El hecho tuvo lugar cuando Mao estaba volviendo del jardín de infantes con su hijo. En un momento dado, el niño le dijo que tenía sed, por lo que su padre entró a un hotel para buscar un poco de agua.

Mao fue secuestrado y vendido a una pareja sin hijos en la vecina provincia de Sichuan, que lo crió como a su propio hijo, reportó la oficina de seguridad pública de la ciudad en un comunicado.

Según reportó la BBC, la pareja habría pagado el equivalente a USD 840 actuales por el niño.

La madre de Mao, Li Jingzhi, dijo que después de que se lo llevaron, ella renunció a su trabajo y envió más de 100.000 volantes a los funcionarios y apareció en varios canales de televisión para pedir su regreso, al punto de convertirse en una cara conocida en el mapa de medios locales.

Reencuentro familiar

 

 

En las últimas tres décadas, Li había seguido 300 pistas falsas para ver si llevaban a su hijo desaparecido.

La familia antes del secuestro

Sin embargo, los padres adoptivos de Mao lo habían rebautizado como Gu Ningning, y creció sin saber de sus padres biológicos o que había sido secuestrado, pero tras más de tres décadas, a finales de abril, la policía de Xi’an recibió el aviso de que un hombre de la provincia de Sichuan había comprado un niño de Shaanxi a finales de los años ochenta.

La policía “envejeció” una de las fotos de la infancia de Mao, según la emisora estatal CCTV, y utilizó el modelo para escanear la base de datos nacional y encontrar coincidencias cercanas. La policía localizó a Mao y luego confirmó que era el hijo secuestrado de Li Jingzhi después de una prueba de ADN.

La madre cumplió su sueño del reencuentro. En su intensa búsqueda, ayudó a ubicar a otros 29 niños perdidos o secuestrados, y finalmente halló al suyo

El lunes, el ahora de 34 años de edad tuvo una emotiva reunión con sus padres biológicos, que nunca abandonaron la búsqueda de su niño desaparecido.

En la reunión, organizada por la policía de Xi’an, Mao salió de una puerta lateral a una sala de conferencias y corrió a los brazos de su madre.

“No quiero que me deje nunca más. No dejaré que se vuelva a separar”, dijo Li mientras se aferraba a la mano de su hijo. Ella había ayudado a ubicar a 29 niños separados de sus familias y prometió que seguirá ayudando con más casos pendientes. “Es el mejor regalo que he recibido”, agregó.

Fuente:AFP