Deportistas franceses tuvieron síntomas de coronavirus en octubre de 2019, un mes antes de que China avisara oficialmente a la OMS sobre el brote

Los atletas sufrieron altas fiebres, dificultades para respirar y fatiga tras participar de unos juegos olímpicos militares en Wuhan, la ciudad que luego se convertiría en epicentro de la pandemia. Crece la desconfianza frente a la información provista por Beijing

Varios deportistas de la delegación francesa que viajó a Wuhan para participar en los Juegos Mundiales militares, a finales de octubre, aseguran haber estado enfermos con síntomas similares a los del coronavirus a su regreso de China, según medios franceses.

Desde el anonimato, uno de los 401 atletas del ejército que representaron a Francia en Wuhan cuenta en la cadena BFM TV que tras volver estuvo enfermo con fiebre, dificultades para respirar y sin poder moverse de la cama durante tres días.

En ese momento, descubrió en las redes sociales que varios de sus compañeros de delegación también estuvieron enfermos con síntomas similares.

En paralelo, toma peso estos días el testimonio de otra de las participantes, la campeona mundial de pentatlón moderno, Elodie Clouvel, que a finales de marzo comentó en una entrevista en la cadena local Loire 7 que creía haber pasado el coronavirus.

Preguntada el 25 de marzo sobre su preocupación de viajar a Japón para participar en los Juegos Olímpicos este verano (antes de que los retrasaran), Clouvel dijo que no le daba miedo porque creía haberla pasado ya, al igual que su pareja, el deportista Valentin Belaud.

“Estuvimos en Wuhan en los Juegos Mundiales militares de finales de octubre y resulta que después todos caímos malos. Valentin faltó tres días al entrenamiento. Yo también estuve enferma. Tuve síntomas que no había tenido antes, pero no nos preocupamos, porque no se hablaba de ello entonces”, dijo.

Además, declaró que cuando vio tiempo después al médico militar, este le dijo que creía que “lo habían tenido porque muchos de la delegación habían estado enfermos”.

Estos juegos mundiales acogieron a más 10.000 atletas de 100 países y tuvieron lugar en Wuhan del 18 al 27 de octubre.

China notificó en diciembre pasado a la Organización Mundial de la Salud de que había detectado el virus en Wuhan, y desde hace semanas está siendo criticada por Estados Unidos y otros países por presuntamente no haber notificado a tiempo sobre el brote del COVID-19.

Este ha sido un punto especialmente controversial en la cronología de la pandemia, ya que se cree que el presunto ocultamiento de parte de China afectó la capacidad mundial de responder a la pandemia. Especialmente después de que el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Zhao Lijian, acusara en redes sociales a Estados Unidos de introducir el virus en China por medio de la delegación de deportistas estadounidenses.

Según el diario Le Parisien, varios atletas han rechazado hablar sobre la cuestión, siguiendo instrucciones de las autoridades militares, que han pedido no responder a las preguntas de la prensa, y otro, también bajo anonimato, explicó que han intentado tranquilizarlos diciendo que el virus llegó en noviembre y no en octubre.

El lunes, médicos franceses compartieron sus sospechas de que el coronavirus ya circulaba por el país a finales de diciembre, después de haber diagnosticado “a posteriori” a un paciente, que ingresó en un hospital de la región de París el 27 de diciembre a partir de las pruebas que se le hicieron entonces.