Redacción Internacional.- En este pequeño país el grado de consanguinidad es muy alto, por lo que, sus habitantes prefieren tener las cosas claras antes de determinadas prácticas

Cuando conoces a alguien una noche y tienes relaciones sexuales no se te ocurre o al menos no es lo normal, preguntar sobre sus lazos sanguíneos.

Sales de fiesta, ligas y acabas en la cama sin más.

Puede que consigas una cita a través de una red social y sepas sus gustos, de dónde es, a qué se dedica, pero tampoco se te ocurriría pensar que puede ser familia tuya.

En Islandia, antes de quedar con otra persona para tomar algo, tener sexo o simplemente saber algo más hacen una sorprendente pregunta.

Para ellos el peligro es real, no quieren enrollarse con nadie que pudiera ser su primo lejano.

Piensa que esta isla tiene más o menos unos 338.000 habitantes, más de la mitad están en su capital, Reikiavik (para que te hagas una idea de la poca población que tienen, solo en Madrid hay tres millones), y es fácil que alguien pueda pertener a tu familia.

Para los islandeses es algo muy imporante y, por eso, hace unos años crearon una aplicación para que sus compatriotas puedan estar tranquilos, y en lugar de darse el número de teléfono, directamente con el bluetooth del terminal averiguan primero si son o no parientes.

Cuanto más primo...

Parece que a los isleños no les hace mucha gracias eso de "más me arrimo" o se les quedó bastante grabado lo de que "si tienes sexo con un primo puede que tu descendencia tenga problemas genéticos".

Esta 'app' coteja el árbol genealógico de cada uno. La información ha sido previamente extraída de los registros del país, almacenados desde 1703.

Si hay parentesco, el móvil emite una alarma y muestra los dos antepasados comunes.

Cuando ven que no eres de su nacionalidad, van todos a por ti. Están un poco desesperados por encontrar a alguien sin lazos sanguíneos conjuntos

No es broma.

El problema va mucho más allá de cualquier anécdota. Hay bastantes casos en los que en alguna reunión familiar más de uno ha descubierto que su pareja en realidad es su primo. ¡De película!

Íslendingabók

Esta aplicación se creó para celebrar el décimo aniversario del 'Libro de los islandeses' y fue realizado con la participación de la Universidad de Islandia.

Su base de datos contiene información genealógica con 1.200 años de historia y ha sido aprovechada por CODE Genetics con la intención de rastrear todas las conexiones familiares conocidas hasta la actualidad.

Registros eclesiásticos y de habitantes, censos nacionales, documentos públicos, crónicas, libros de convicciones, varias publicaciones sobre genealogía, libros sobre individuos en ocupaciones específicas, listas de descendientes y registros ancestrales, artículos conmemorativos forma parte de esta acumulación con la que podrás saber si la persona que querías conocer pueda ser de tu familia.

Si eres de allí puedes utilizarlo desde hace muchos años, aunque ahora también hay app móvil. Es gratis y ya hay dos tercios de la población que han solicitado tener acceso a la base de datos. Tranquilo, es anónimo y los científicos nunca conocen las identidades reales de los participantes, solo un código de siete dígitos.

Evita un disgusto

Además, no es de extrañar entrar a un bar en Reikiavik y ver cómo los jóvenes consultan en su 'smartphone' el nombre de la persona con la que quieren ligar.

Cristina, una española residente en la capital explica a El Confidencial que "muchos lo hacen por diversión, pero que es habitual mirarlo antes de tener un encuentro más íntimo con alguien".

La información ha sido previamente extraída de los registros del país. Si hay parentesco, el móvil emite una alarma y muestra los antepasados comunes

"Cuando ven que no eres de aquí, van todos a por ti. Están un poco desesperados por encontrar a alguien sin lazos sanguíneos conjuntos, así que en cuanto se enteran de que eres de otra nacionalidad cualquiera se interesa. A veces se hace un poco pesado", añade.

 

Fuente: El confidencial