¿Cuánto mantenimiento le has dado a tu colchón desde que lo compraste? Ten cuidado, conoce cómo limpiar tu colchón, sin mojarlo, de manera casera y eficiente

Muchas veces no solo es importante dormir, sino cómo y en dónde le brindamos a nuestro cuerpo su tiempo de descanso, y el colchón en nuestro dormitorio juega un rol fundamental en ello.

Por ello, si ya empezaste a sentir malos olores o te disgustan algunas manchas y ácaros, te mostramos cómo limpiar tu colchón, sin humedecer la superficie y de forma casera:

1. Necesitarás un cepillo de dientes en desuso, una aspiradora sencilla y bicarbonato de sodio. ¿Por qué? Esta sustancia, además de tener un sinfín de propósitos, es un gran aliado en la limpieza del hogar. Es un gran blanqueador y desinfectante casero.

2. Deberás esparcir la sustancia en la superficie del colchón o en la zona de alguna mancha. Deja actuar sus propiedades por alrededor de 30 minutos a una hora.

3. Después, frota bien con cepillo en las zonas que más te preocupen y espera unos 15 minutos. No enjuagues la superficie.

4. Para manchas con olores, como la orina, puedes agregar unas gotas de algún aromatizante desinfectante en la superficie, sin mojar en exceso.

5. Utiliza la aspiradora con el fin de quitar la sustancia del bicarbonato y observar la diferencia.

Es importante recordar que un colchón también debe renovarse cada 10 a 15 años, dependiendo del material del utensilio. De lo contrario, además de ser un foco infeccioso, también podría interrumpir tus horas de sueño. Estas son algunas recomendaciones:

Muévelo frecuentemente: A pesar de ser un poco tedioso, gira el colchón si este cuenta con dos superficies aptas para dormir. También cambia la posición (de arriba abajo y viceversa) una vez al mes si es necesario, dependiendo de dónde y cómo vivas.

La ventilación es crucial: Tanto en invierno como en verano, una vez a la semana, pasa la aspiradora y déjalo sin sábanas por unas horas.

Evita mojar el colchón: Si vas a limpiar alguna mancha, no empapes el colchón de agua, atraerás hongos. Trata la suciedad con una esponja bien húmeda y el bicarbonato, si es necesario.

No te olvides de la limpieza: Si es posible, limpia el colchón a vapor todos los meses, sobre todo en las esquinas y dobletes, donde se acumula más polvo.

Compra protectores: Así como para las almohadas y edredones, también existen protectores de colchón, los cuales evitan los ácaros y el polvo.

Fuente: América Tv