El príncipe Harry de Inglaterra y su esposa Meghan Markle pusieron en la lista negra a cuatro grandes tabloides del Reino Unido, por supuestamente haber publicado historias "tergiversadas, falsas e invasivas más allá de lo razonable".

En una carta dirigida a los editores de The Sun, Daily Mail, Mirror y The Express, la pareja, que oficialmente abandonó sus funciones como miembro de la realeza británica a finales de marzo, anunció que no habría "ninguna colaboración" con estos diarios. ¿La razón? dicen que están en total desacuerdo con el estilo de presentación de las noticias de estos cuatro medios, los cuales, según ellos, han destrozado la vida de muchas personas.

Su nueva política de medios significa que no responderán a ninguna consulta de los tabloides en cuestión, aunque en su carta, compartida en Twitter por el especialista de medios del Financial Times, Mark Di Stefano, aclaran que esta decisión no afecta a otros medios de comunicación. “No se trata de impedir una conversación pública o censurar noticias precisas. Los medios tienen todo el derecho de informar, pero no pueden basarse en mentiras", dicen.


Según el nieto de la reina Isabel II y su esposa, es preocupante que una parte influyente de los medios de comunicación, durante muchos años, haya tratado de evitar asumir la responsabilidad de lo que dicen o imprimen, incluso cuando saben que es distorsionado, falso o invasivo. “Cuando el poder se disfruta sin responsabilidad, la confianza que todos depositamos en esta industria tan necesaria se degrada”.

El escrito también cita que "Los duques de Sussex han visto las vidas de gente cercana -así como de completos extraños- totalmente demolidas solo para que chismes salaces aumenten los ingresos publicitarios".

Esta carta, que ha sido considerada como un ataque sin precedentes contra una gran parte de los medios, llega en vísperas de la primera audiencia de la demanda de Meghan contra Associated Newspapers, editora del Mail on Sunday que se celebrará esta semana en los tribunales del Reino Unido.

El motivo de la demanda por parte de la duquesa de Sussex surge luego de que Mail on Sunday publicara extractos de una carta “privada y confidencial” enviada a su padre en agosto de 2018, tres meses después de su boda con el príncipe Harry.

Después de que la pareja anunciara en enero su deseo de retirarse de los deberes reales, muchos medios británicos empezaron a especular sobre las posibles razones, entre las cuales incluían que Meghan no era feliz con su nueva vida siendo parte de la realeza, lo cual no les cayó muy en gracia a los duques de Sussex y por lo que, desde ese entonces, empezaron a quejarse de la intrusión mediática en sus vidas privadas.