Un gran susto se llevó un ladrón cuando ingresó a una casa y se encontró con un cadáver colgado en la oscuridad, de acuerdo con una publicación de un medio internacional.

El hecho ocurrió ayer miércoles en Hamilton, Nueva Zelanda.

BBC Mundo señala que  horrorizado,  el hombre de 26 años llamó a la policía gritando. Sus gritos alertaron a los vecinos, quienes pensaron que era una disputa doméstica y también llamaron a la policía.

El hombre hizo el macabro hallazgo la madrugada del miércoles, cuando intentaba robar en la casa vacía en el suburbio de Fairfield.

La Policía de Hamilton aseguró que al contactar a la policía para dar la alarma, el hombre había sido detenido, pero no se presentaron cargos y fue puesto en libertad después de ayudar a las autoridades en sus investigaciones