POR LUIS D. SANTAMARIA
El autor es periodista. Reside en Monte Plata

El ingeniero Miguel Vargas tiró por la borda toda posibilidad de volver a ser el candidato presidencial del PRD desde el preciso momento que asumió la radical posición de rebeldía en contra de la candidatura de Hipólito Mejía en las elecciones pasadas.
Esa posición torpe e irracional sin lugar a dudas fue la causa principal de la derrota electoral del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) durante los pasados comicios,  admítanlo o no sus seguidores lo,  que le ha valido el rechazo total de las bases de la organización política.

Los seguidores del presidente del PRD no pueden pretender ahora que para poder  salir de la crisis institucional en que se encuentra inmersa la organización política hay  que regalarle a Miguel Vargas la candidatura presidencial para las elecciones del 2016.

Eso ni de juego se le puede plantear a las bases perredeístas que ven en Miguel Vargas la persona responsable de que miles y miles de seguidores y simpatizantes del PRD estén hoy pasando la mil y una noche tragándose un cable fuera del gobierno.

Miguel Vargas y sus seguidores perdieron con su accionar la oportunidad de oro en sus aspiraciones cuando decidieron no incorporarse a la campaña electoral del candidato presidencial del PRD, Hipólito Mejía y por el contrario prefirieron hacer causa común con el enemigo.

Señores tengan un poco más de respeto por los perredeístas y entiendan de una buena vez que la oportunidad de oro para que Miguel Vargas fuera nuevamente candidato presidencial del partido blanco era si hubiese contribuido al triunfo electoral en las pasadas elecciones y no lo hizo.

Pero como no lo hizo creyendo que con eso le hacía un mal a Hipólito Mejía y no pensó en las bases del partido entonces tendrá que retirar sus aspiraciones de volver a ser el candidato presidencial del PRD para las elecciones programadas para el 20 de mayo del 2016.

Hay que ser muy osado y atrevido para plantear a las bases perredeístas  que como posible solución a la crisis interna del partido hay que otorgarle a Miguel Vargas la candidatura presidencial, cosa que ni de juego se le puede plantear a los miles y miles de seguidores de ese partido.

 Salir con una propuesta como esta es echarle más leña al fuego, porque en realidad al sector Miguel Vargas no le interesa en lo absoluto la unidad interna como lo demostró luego de la convención en que fue escogido Hipólito Mejía como candidato presidencial que se plantó de que supuestamente fue víctima de un fraude,  cuando todo el mundo sabe que eso no es verdad.

Todo el mundo sabe que la manzana de la discordia en la crisis interna del partido blanco es precisamente el ingeniero Miguel Vargas Maldonado que con su torpe accionar se ha ganado el rechazo total de las bases perredeístas que ven en este el principal  obstáculo para retornar al poder.