Las parejas que más derraman miel tratando de demostrar su amor en las redes sociales son quienes más infelices son en su relación, reveló una investigación hacia esta tendencia de las nuevas parejas.

Los dos estudios explicaron que las personas que exceden su tiempo en las redes publicando fotografías o posts amorosos suelen hacerlo para compensar su insatisfacción de la relación.

La ciencia lo confirma

El estudio, liderado por la doctora Gwendolyn Seidman, como complemento a otro estudio que realizó hace años, consistió en analizar la reacción de 48 algunos usuarios a estas excesivas manifestaciones de “amor”, en donde se notaron 2 patrones muy marcados en la conducta de las 348 parejas participantes.

A los participantes se les pidió compartir información potencialmente embarazosa acerca de la pareja, contenido en el muro de la pareja que pudiera ser incómodo de manifestar personalmente, y por último, contenido que muestre más afecto de lo que realmente muestran en público.

Los resultados que arrojaron fue que las excesivas muestras de cariño fueron menos comunes que las situaciones normales de pareja. Asimismo, las personas que en su perfil tenían una fotografía en pareja y que suelen publicar contenido de su relación tienden a ser más felices, en comparación a aquellas que hacen esas publicaciones con menos frecuencia.

No obstante, resaltó que las exageradas muestras de cariño tenían una relación directa con la insatisfacción en la relación.

Es decir, las manifestaciones más generales de afecto tienden a realizarlas las parejas más felices, en cambio, las manifestaciones más exageradas las hacen quienes no son tan felices como quieren aparentar ser.

“Esto sugiere que las exageradas demostraciones de afecto son usadas como forma de compensación en parejas más débiles. Para empezar, quienes estaban menos satisfechos pudieron publicar en Facebook un contenido que demostrara niveles más altos de afecto, y no necesariamente lo tenían en la vida real, pero creen que esto puede ser favorable para la relación.”, finalizó la investigadora.

Fuente: Soy Carmín