Durante el periodo de la menstruación el cuerpo de la mujer elimina las células de recubrimiento del útero a través del flujo de la sangre menstrual.

Lo más común es que los períodos menstruales duren entre tres a ocho días. No obstante, esta cantidad de días puede variar en cada mujer.

El promedio de pérdida de sangre durante la menstruación es de 100 ml. En ocasiones se puede presentar sangrado abundante, por lo que dicha cifra varía.

El sangrado menstrual abundante se define como una pérdida excesiva de sangre en varios ciclos consecutivos. Esto puede interferir con la actividad física, emocional o social de la mujer.

Síntomas del sangrado menstrual excesivo

El período menstrual dura más de 7 días

El flujo menstrual presenta coágulos de sangre grandes o sangrado constante abundante
Dolor constante y agudo en el abdomen
Requerir cambiar toallas o tampones durante la noche
Fatiga
De hecho, un sangrado abundante puede causar problemas graves de salud como la anemia, la cual se presenta por deficiencia de hierro.

Aunque la visita al ginecólogo nunca está de más, se puede tratar el sangrado menstrual abundante de forma natural, siempre y cuando no exista algún trastorno médico grave.

Dieta balanceada
Con una dieta equilibrada que sea rica en nutrientes puedes asegurarte de que tu periodo menstrual sea regular y prevenir el sangrado abundante.

Se recomienda elegir alimentos saludables y llenos de nutrientes como:

Nueces (ricas en proteínas)
Vegetales de hojas verdes (ricos en hierro)
Productos lácteo (para obtener calcio).
También hay que considerar consumir aceites y semillas, como el aceite de oliva y las semillas de linaza, para aliviar el sangrado abundante.

Ingerir vitamina B para reducir los cólicos

Las vitaminas del grupo B son componentes esenciales para metabolizar el exceso de estrógeno en el hígado.

El estrógeno es una hormona que controla el ciclo menstrual y, si no mantiene un adecuado equilibrio, ocasiona cambios en el sangrado.

Las carnes blancas y las legumbres, como los garbanzos y espárragos, contienen mucha fibra y están enriquecidas con vitamina B, la cual previene los cólicos.

La vitamina B también promueve la síntesis de las prostaglandinas, que son un compuesto esencial para reducir la formación de coágulos sanguíneos anormales.

Recuerda que la formación de coágulos evita una fuga de la sangre del torrente sanguíneo, pero en ocasiones vienen acompañados con mucho dolor, lo cual no es normal.

Incorpora a tu dieta los alimentos ricos en hierro y vitamina C para evitar la anemia

El hierro desempeña un papel fundamental en la formación de los glóbulos rojos. Así, una deficiencia de hierro puede provocar anemia, la cual puede causar un sangrado abundante.

Resulta necesario mantener una dieta rica en estos componentes, en especial durante los días en que se presenta el sangrado menstrual.

De esta forma cuidarás de tu cuerpo ingiriendo los nutrientes adecuados para disminuir el sangrado abundante y la fatiga que se presenta durante esos días.

Se recomienda consumir vegetales y frutas para obtener hierro, calcio y vitamina C. No dudes en incluir en tu dieta:

Brócoli
Col rizada
Camote (batata)
Ciruelas pasas
Albaricoques secos
Jugos e infusiones caseras

Zumo de naranja y limón

Las frutas cítricas gozan de un elevado contenido de vitamina C y antioxidantes que nos pueden ayudar a controlar los síntomas del sangrado menstrual abundante.

Ingredientes
El jugo de 6 naranjas grandes
2 cucharadas de jugo de limón (20 ml)
Preparación
Exprime el jugo de las seis naranjas grandes sobre un colador para evitar las semillas.
Agrega dos cucharadas de jugo de limón.
Tómalo recién hecho, tres o cuatro veces al día.
Si el jugo te parece muy ácido, puedes diluirlo con media taza (125 ml) de agua.
Asimismo, muchas hierbas cuentan con propiedades astringentes y se han usado por mucho tiempo para controlar el sangrado uterino excesivo.

Las hierbas ayudan a corregir los desequilibrios hormonales y controlar el flujo menstrual.

Semillas de cilantro
Además de ayudarnos a controlar la cantidad de flujo, la infusión con semillas de cilantro disminuye síntomas como la inflamación y el dolor.

Ingredientes
1 cucharadita de semillas de cilantro (5 g)
2 tazas de agua (500 ml)
Preparación
Agrega las semillas de cilantro en una olla con 2 tazas de agua y déjala a fuego lento hasta que el líquido se reduzca a la mitad.
Espera a que repose y tómala dos veces al día.

Té de jengibre

Ingredientes
1 taza de agua (250 ml)
1 cucharada de jengibre pelado y rallado (10 g)
1 cucharada de miel (25 g) (opcional)
Preparación
Coloca el agua y el jengibre en una olla pequeña y caliéntalo durante 10 minutos, hasta que hierva.
Déjalo reposar hasta que alcance una temperatura apropiada para tomarlo.
Cuela el jengibre y vierte el té en una taza.
Si lo deseas, puedes agregar una cucharada miel para endulzarlo.
Toma el té dos veces al día, una por la mañana y otra por la noche.

Té de canela

Ingredientes
1 taza de agua (250 ml)
5 o 6 ramitas de canela
Preparación
Coloca el agua y las ramitas de canela en una olla pequeña y caliéntala por aproximadamente 10 minutos.
Retira la infusión del fuego y déjala templar hasta que obtenga una temperatura apropiada para tomarlo.
Retira la canela y vierte el té en una taza.
Consúmelo dos veces al día, en la mañana y en la noche.

Fuente: Mejor con salud