El fútbol portugués está conmocionado por el escándalo de corrupción que sacude desde principio de mes al SL Benfica. Se han filtrado unos correos electrónicos que acusan al club más laureado del país de intentar amañar algunos resultados de la liga lusa y, como si fuera poco, también habrían intentado sobornar a algunos árbitros con prostitutas.

Según la información difundida por los principales medios locales, como Correio da Manhã, Record y O Jornal Económico, los correos electrónicos que salieron a la luz demostrarían que el club de la capital portuguesa habría ofrecido servicios de trabajadoras sexuales a los árbitros y les habría pagado las habitaciones del hotel.

En este caso, las acompañantes cobraban USD 235 por cada cliente y USD 470 si eran tríos. Los encuentros sexuales se produjeron en su mayoría en "un hotel de cinco estrellas en Lisboa" entre 2013 y 2014.

 

El Benfica, por su parte, se ha defendido con un comunicado en el que advierten que intentarán demostrar que las informaciones son falsas: "Mantenemos una posición firme y clara, la que anunciamos al comienzo de esta historia: no hay hechos que puedan justificar ninguna acusación en este proceso. Haremos todo lo posible para eliminar estos cargos absurdos e injustificados."

Los correos muestran que el Paulo Gonçalves, ex asesor legal de 'Las Águilas', tiene una estrecha relación con Nuno Cabral, ex delegado de la Liga Portuguesa de Fútbol Profesional. El caso bautizado como "E-toupeira" (topo de correos electrónicos) ha llevado a la Fiscalía a acusar al club de un total de 30 delitos y pide penas de entre seis meses y tres años sin poder competir.

Según la Fiscalía, el Benfica ofrecía regalos e invitaciones a funcionarios a cambio de información privilegiada de procesos judiciales en curso, la mayoría relacionados con el fútbol e incluso con el Benfica, que ha sido encausado en un total de 79 presuntos delitos, muchos de ellos por falsedad informática, violación de secreto, violación de deber de sigilo o corrupción activa.

Mientras prosiguen las investigaciones judiciales, los jugadores del Benfica intentan evadirse del aluvión mediático para centrarse en la Liga lusa  y en la Champions League, donde comenzaron con una derrota ante el Bayern Múnich en la fase de grupos.