Santo Domingo, RD.- La política compay, la política compay...es un estribillo de una canción grabada por la orquesta de Los Kenton, que se hizo muy popular hace varias décadas en el país, pero que mantiene vigencia por la forma en que se manejan nuestros políticos, que solo piensan en ellos mismos al tomar decisiones, y mandan para el "carajo" a la Patria y a su población.

Es por esa razón, que líderes y dirigentes de partidos renuncian para irse a otras parcelas, en desacuerdo con decisiones que se toman en las mismas. Pero nadie puede sorprenderse si luego regresan a su antiguo partido o participan unidos en certamenes electorales con quienes consideraban sus enemigos politicos.

El asunto viene al tapete por el caso del expresidente Hipólito Mejia, del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y Miguel Vargas Maldonado, del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), quien en los comicios de 2016 apoyó al presidente Danilo Medina, del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

Miguel ha dicho que sus diferencias con Mejía no son personales, y algunos podrían pensar que luego de los daños politicos que atribuyen a Vargas haberle hecho al PRD, y que obligó la salida de Hipólítico y otros de sus dirigenes perredeistas para formar el PRM, un acuerdo entre ambos sería imposible.

Pero no se frote las manos, el expresidente de la República reaccionó diciendo que “no tiene esos prejuicios políticos, ni trauma de política, ni chismes de antes”.  

Mejía no descarta un acercamiento político con el presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Miguel Vargas, en el proceso electoral del 2020, luego del saludo que se dieron ambos la noche del pasado lunes durante la inauguración del foro del Parlamento Centroamericano (Parlacen) en el Ministerio de Relaciones Exteriores.  

“En política no se puede descartar nada... ¿cómo se va a descartar? No se puede descartar nada, en todas las actividades”, alegó Mejía, quien renunció del PRD luego de las elecciones del 2012 en las que fue candidato, debido a diferencias con Vargas.

Comentó, para justificar su posición, que un hijo suyo es cuñado del presidente del PRD y que fue 40 años enemigo de Balaguer y que después fue “hijo” del fenecido líder del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC).

Enfatizó, incluso, que hay personas que se divorcian y luego se vuelven a casar. Mejía fue entrevistado en la XXVI Conferencia Centroamericana y del Caribe de Partidos Políticos del Parlacen.

Rol de los partidos

El expresidente Mejía habló  también en una conferencia sobre “El rol de los partidos políticos hacia el 2030”, donde críticó las debilidades de la democracia y propuso fórmulas para fomentar la credibilidad en los partidos políticos y nuevos modos del ejercicio del poder a favor del pueblo.

Dijo que la erradicación de la corrupción de los gobiernos es la tarea más urgente de los partidos políticos de esta época, con miras a restablecer la confianza de los ciudadanos en la política y sus instituciones. Mejía opina que, camino al 2030, el futuro es de los partidos programáticos, como una alternativa que supere la maquinaria clientelista que ha predominado en las últimas décadas.