NUEVA YORK  — Tragedias como la explosión de gas en East Harlem o el alud de tierra en el estado de Washington dejan a decenas de personas en un "shock" emocional, y hasta de negación, al perder en un abrir y cerrar de ojos a uno o más de sus seres queridos.

Ira, dolor, tristeza, ansiedad, depresión y desasosiego son algunos de los sentimientos que experimentan los allegados de las víctimas. Estos mismos sentimientos los reviven también quienes han perdido a uno de los suyos en un siniestro, accidente aéreo o fenómeno natural similar, al ver por televisión las imágenes de una catástrofe.

Ante estos estados emocionales, que pueden llevar a quienes lo experimentan a una depresión profunda, muchos se preguntan ¿qué hacer para salir adelante tras la perdida de un ser querido en una tragedia? ¿Qué hacer para que el duelo transcurra de forma natural y no llegar a tocar fondo?

"El ser humano tiene la capacidad de sobreponerse a cualquier situación traumática", explica la psicoterapeuta Anabel Castrezana, de Kaiser Permanente en Santa Ana. "Lo importante en esta situación es entender cada una de las etapas de duelo, que pueden causar ansiedad y depresión en los sobrevivientes".

Y si bien es cierto que las personas reaccionan de diferentes maneras ante la pérdida de un ser querido o cualquier situación estresante o de dolor, Castrezana destaca que existen ciertos consejos que ayudan a alivianar el duelo y hasta llegar a salir de éste fortalecido.

Para el afectado

Quienes han perdido un ser querido en una catástrofe deben:

Desahogarse con alguien de confianza.

No retener los sentimientos.

Limitar escuchar y ver las noticias que emiten los diferentes medios sobre la catástrofe. Esto puede contribuir a la ansiedad.

No aislarse. Hay que rodearnos de aquellos que nos quieren apoyar. El aislamiento contribuye a la depresión.

No acudir a medios fáciles para liderar con el dolor como el alcohol o las drogas. Estos solo producen un alivio momentáneo y causan más problemas en el futuro.

Buscar ayuda profesional si siente sentimientos encontrados de culpabilidad. "Es difícil de aceptar pero los seres queridos siempre buscan alguna manera en cómo prevenir un desastre. Es importante entender que somos humanos y hay muchas cosas que no podemos controlar", expone la galena.

Unirse a los grupos de apoyo que varias iglesias y organizaciones comunitarias ofrecen durante el proceso de duelo.

Mantenerse ocupado y buscar actividades que ayuden a la relajación mental y física.

Para quienes los rodean

Las personas que están alrededor de la persona afectada ayudan si:

No juzgan a la persona afectada por sus decisiones y reacciones emocionales. Hay que entender que cada quien se desahoga de diferente manera y a su tiempo.

Ofrecen apoyo incondicional y no tratan de resolver los problemas.

Saben escuchar y saben cuándo recomendarle al afectado que busque ayuda profesional.

Están prestas a ayudar al afectado cada vez que lo solicita.

Recursos de ayuda

Si FEMA y la Cruz Roja están detrás de la asistencia que se le ofrece a víctimas, sobrevivientes y personas que han perdido a un ser querido en una catástrofe, puedes obtener a través de éstas información de organizaciones que ofrecen terapia emocional gratis o a bajo costo.

Si tienes seguro médico habla con tu doctor de cabecera sobre tu situación emocional para que te remita al terapista o al psiquiatra, si es que lo necesitas.

Mental Health America, una organización nacional con base en la comunidad, ofrece asistencia psicologógica. Para información, visita www.mentalhealthamerica.net.

La organización NAMI ofrece grupos de apoyo a nivel nacional; para ubicar uno de ellos, llama  a la línea nacional 1-800- 950- 6264 o visitar la pagina web www.nami.org.